Ignacio Schneider encontró la publicidad con la que soñaba cuando salió de Montevideo. Desafortunadamente para él, sin poder pasar de la Primera A, todas las notas y los dedos apuntaban a su problema del ojo, por el golpe que le propinó Izaías Ramos del Socio Águila
Ignacio Schneider encontró la publicidad con la que soñaba cuando salió de Montevideo. Desafortunadamente para él, sin poder pasar de la Primera A, todas las notas y los dedos apuntaban a su problema del ojo, por el golpe que le propinó Izaías Ramos del Socio Águila.
La vida de Nacho cambió en Querétaro. Aunque los pronósticos médicos son halagüeños, lo cierto es que ese ojo que lleva y que parece cubierto por un terciopelo blanco le ha impedido realizar su profesión con esmero. Por eso entró en pleito con los Gallos Blancos en busca de un aumento salarial el cual dirimió en la Femexfut.
“Fue un cambio radical, no sólo porque ahora tengo un ojo claro cuando era café... me jodí en muchas cosas a pesar de que clínicamente avanzamos pero en ánimo y en poder jugar al futbol ha venido un bajón porque no es igual. No he recuperado la vista, veo sólo un destello blanco de ese lado y también depende mucho de Dios cuánto vaya a mejorar. Ahora ya puedo correr y saltar, porque antes no me lo permitían hasta que la retina se pegara bien a mi globo ocular, lo cual ya sucedió”, contó Schneider quien salió contento con el aumento salarial que le respetaron.
El presidente de los Gallos, Ulises Zurita abandonó las instalaciones de la FMF satisfecho de haber resuelto el problema con el mediocampista.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario