SOLO GALLOS
CORSARIOS
Ya pasaron algunos días, pero quiero comentar los vestigios que me dejó en la memoria el partido del Sábado. Primero: He sido un acérrimo crítico de la forma en que se ha manejado el equipo a nivel directivo, pero siento que el año inicia bien para el equipo aunque no se haya ganado. Gallos juega desde el año pasado a las 19 horas. Un horario espléndido, el que más le acomoda al equipo y el que también prefiere la afición. Primer acierto si no acordamos de los tiempos de grupo Autofín cuando el equipo tenía horarios imposibles, con cambios constantes y que no creaban un hábito como lo empezamos a tener ahora, de que los Sábados a las siete, es la cita con Gallos. Segundo: el uniforme. No sé que te pareció a ti amigo lector, pero en mi opinión es precioso. Blanco, con esa línea azul muy delgada a la altura del pecho. Estoy seguro que en cuanto salga a la venta, va a tener muy buena aceptación entre La Comunidad del Gallito. Tercero: El entretenimiento al medio tiempo. Un grupo de entusiastas porristas que contagian un ambiente festivo a la tribuna. Lo sé, es un espectáculo sumamente sencillo, e ignoro si fue a iniciativa de la directiva o de un grupo de aficionados. En ambos casos, un aplauso a los de pantalón largo. En el primer caso, por su iniciativa; en el segundo, por estar abiertos a las propuestas. Cuarto: Tuvimos, por tercer torneo consecutivo, partido de presentación. Es más, me pareció genial lo del partido contra Salamanca en Reyes cuando el ingreso al estadio era por medio de un juguete. Quinto, pero no menos importante: el esfuerzo para reforzar al equipo. Las inclusiones del Bosco y Márgaro, ya se notaron, el equipo se ve mucho mejor que el año pasado. Llegó un arquero con buen cartel que no me convenció del todo, pero el esfuerzo de los directivos está allí. Imagina este equipo ya con más partidos de rodaje, con Collazo, con Mora y, ¡por el amor de Dios! con el charrúa Schneider, que ruego a los cielos sea un delantero letal o por lo menos mucho más que nuestro Roberto Nurse. El moreno ya tiene un ratote jugando en la A y su nivel de juego no mejora. Sigue siendo torpe con los pies, errático frente al arco y no tiene ese don de los grandes delanteros para aparecer cuando el equipo más lo necesita. Nurse le va a meter tres o cuatro goles a un equipo como el Tapatío, pero no lo imagino anotando el tanto de la diferencia en una semifinal contra León o Dorados. Por todo eso, cruzo los dedos para que el uruguayo sea un delantero efectivo.
EL APUNTE
¿Del partido contra Colima? Me gustó mucho, reflejó fielmente lo que es este equipo, su entrega, su mala fortuna, su dramatismo. Esa tendencia a dejarnos sin aliento hasta el último minuto del partido. Así es nuestro equipo, por eso lo amamos. Nos administra las alegrías como una pequeña droga, en reducidas dosis. Nos deja morir lentamente. Se guarda los mejores momentos para otra ocasión. En eso radica el encanto de estos colores, siempre nos deja con ganas de más y nunca un partido de Gallos estará decidido. Por ello no entiendo a los que abandonan el estadio cuando faltan pocos minutos, a los que reniegan de esos espasmos, de esos calambres, de ese sudor en las manos, de ese grito de gol ahogado en un suspiro. El amor por Gallos no es un amor para cobardes ni para inconstantes. El amor por Gallos es un amor para locos, para poetas, para soñadores, para un grupo de corsarios que se acostumbran cada Sábado a vivir con el alma en un hilo, un hilo blanco que teje los sueños y milagros que de muy de cuando en cuando suceden en el Corregidora.
PARA REFLEXIONAR
Mago: Gracias por volver. Esta es tu casa. ¿El penal? Mejor errarlo ahora y no en la liguilla. ¡Animo, eres el Gallo más Blanco!.
manriquemind@yahoo.com.mx
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