AFICIONADO
Quiero dedicar esta columna con una profunda admiración a todo aquél aficionado de Gallos, que lo es en todo momento. A todos aquellos Gallos de veinticuatro horas que nunca faltan a la cita sabatina en el Corregidora. A los que cuando no van al estadio se sienten atrapados e incómodos en bautizos, comidas familiares, compromisos laborales y recorridos de centros comerciales. A todos los Gallos que por motivos de trabajo o estudio se encuentran lejos, muy lejos de esta hermosa ciudad y del epicentro mismo de nuestra pasión: el Estadio Corregidora. Resulta extraño pero creo que hay un sentimiento de soledad que predomina de una u otra forma en todo aficionado a este equipo con más mitología que historia. Todos en algún momento nos hemos sentido más solos que la luna por irle a un equipo que no es de Primera, que no es ganador por excelencia, que no es popular entre el resto de los mortales. A veces, cuando el mundo es sórdido y ajeno creemos que somos los únicos ingenuos que le vamos a Gallos. Y es por eso que sentimos una alegría cuando nos encontramos a otro aficionado con la playera azul y negro a rayas verticales bien puesta. No lo conocemos, pero de entrada lo sentimos casi como un amigo, porque su playera es como un santo y seña para nosotros. Un código que dice que existimos más allá de nosotros mismos. Que no estamos solos, que aquí estamos y que jamás nos rendiremos. El aficionado a Gallos es aquél al que le pasa de noche el llamado clásico de clásicos que enfrenta a los dos equipos más populares del país. Es el mismo que estando en tierras extrañas sufre y se impacienta porque no tiene noticias de su equipo, porque no sabe cómo va Gallos. Es aquél toma por asalto un ciber café para enterarse por el minuto a minuto que Gallos ha perdido una vez más y se entristece, pero sabe que el dolor es temporal. ¿Tienes idea amigo lector de cómo vive su pasión un aficionado a Gallos que radica en lugares como Torreón, Monterrey, Veracruz? ¿Sabes de la nostalgia de seguir un partido de nuestro equipo por la internet desde EU o la misma Europa? Felicito a las páginas somosgallos.com y gallosblancos.org.mx, porque gracias a ellas los seguidores que no radican en nuestra ciudad pueden seguir los juegos de nuestro equipo en casa y en ocasiones en plazas lejanas y extrañas.
EL APUNTE
Espero que al igual que yo, hayas disfrutado del triunfo sobre Santos. Más allá de que el juego no tenía mucho de por medio, sirvió de reconciliación entre equipo y afición. Sirvió para dejar buenas vibras en ese campo que volveremos a ver hasta dentro de cuatro semanas. Sirvió pata deleitarnos con los tres goles del Tanque Gerk que lo ubican como el mejor goleador del año futbolístico en la A, asegurando el subcampeonato de goleo en este torneo. Sirvió para darnos una idea de cuál será el cuadro titular en la serie por el ascenso. Sirvió para estar con nuestro equipo y celebrar una victoria en una hermosa tarde de Abril.
PARA REFLEXIONAR
El juego contra Indios no tiene más importancia que aprovecharlo como preparación para la final. Es el último juego oficial antes de la hora de la verdad. No sirve ya para asegurarnos un mejor lugar en la tabla y tratar de tener el juego definitivo en casa. Para fines numéricos no tiene atractivo alguno. Con todo y eso, me encantaría que cerráramos con un triunfo fuera de casa. Lo necesitamos para fortalecer nuestro optimismo. Sobre todo pensando que el equipo puede lograr el ascenso en un patio ajeno y hostil.
manriquemind@yahoo.com.mx
No hay comentarios.:
Publicar un comentario